¿Cómo organizar su bolsa de excursión?

¿Cómo organizar su bolsa de excursión?

Lo más importante en el trekking es ser ligero y tener el equipo necesario. Con una buena organización de la mochila, disfrutará de sus salidas en el desierto, cansándose menos y divirtiéndose más. Te mostramos cómo hacerlo.

Tengan en cuenta el clima

Cuando viajas por las montañas, lo primero que necesitas saber es el tiempo. Basándose en la información que ha adquirido, determinará qué equipo necesita. Esto te ayudará a evitar cargar varios kilos más en tu mochila. Dicho esto, si el clima promete un sol abrasador, no necesitarás un faro.

Por otro lado, recuerde traer una gorra, gafas y ropa ligera de algodón. Por otro lado, cuando el frío persiste, puedes optar por ropa de abrigo como el vellón. Y si viajas a una zona donde las precipitaciones son frecuentes, elige sandalias y un impermeable.

Mantenga los objetos útiles a mano

La otra forma de organizar el equipo de senderismo es colocar las herramientas más móviles en el exterior. Por ejemplo, la botella de agua debe estar en los bolsillos de la bolsa y no en el interior. Del mismo modo, para la cámara, debe colgar en tu cuello en todo momento y no en la parte inferior de tu equipo.

Lo mismo ocurre con la litera que se usará como asiento durante la aventura, puedes colocarla en la parte superior o inferior de tu bolsa. En cuanto a las golosinas y la ropa de abrigo, puedes colocarlas en el portaequipajes, cerca de la abertura. De esta manera, cuando tengas hambre o si la temperatura baja, puedes vestirte rápidamente y comer hasta hartarte sin tener que desempacar todo en cada oportunidad.

Distribuye el peso de la bolsa

La distribución del peso también forma parte de la organización de su mochila de senderismo. Para ello, coloque los accesorios más pesados como el kit de cuidados y el kit de artículos de aseo en el centro de la bolsa. En la parte inferior, se deben colocar las mantas y la ropa que se usa con menos frecuencia. Y en la zona superior, pongan todo el resto del equipo incluyendo la comida.

Como resultado, tendrá una bolsa bien equilibrada que podrá llevar más fácilmente, lo que claramente favorece su progreso en el campo. Por otro lado, si el peso no está bien distribuido, te sacudirá el equipaje. Y para compensar, intentarás mantener el equilibrio. Y sólo con esa pequeña preocupación, puedes reducir el ritmo de toda la pandilla si es un paseo en grupo.

Dale forma a tu mochila…

También puedes terminar con una bolsa abollada una vez que esté llena. Esto causa molestias en la espalda. Para evitar este tipo de molestias, organice sus pertenencias estratégicamente. Así que, aparte de la distribución del peso, asegúrate de que el portaequipajes se ajusta a tu postura.

Para ello, aprieta las correas que se deslizan bajo tus brazos y la que se envuelve alrededor de tus caderas si tu modelo las tiene. Además, ventila un poco el interior de tu cesta para que se adapte más fácilmente a tu morfología. Seguramente estarás más cómodo con una bolsa que se pegue a ti que con una sin forma.

El peso recomendado

La sobrecarga puede cansarte rápidamente en el camino. Por eso parece igualmente importante evaluar el peso del equipo antes de salir. Así que, clasifica el equipo y elimina todas las pequeñas peculiaridades, como cosméticos y aparatos electrónicos aparte del GPS.

Además, lo principal cuando se camina es liberarse de la rutina diaria del metro, trabajar, dormir y disfrutar de la naturaleza al máximo. Pero también limítate a cambiarte de ropa sólo para ganar unos pocos cientos de gramos más. El peso recomendado sería menos de 10 kg. Sin embargo, cuando el viaje dura varios días seguidos, como es el caso del Trekking, se puede utilizar una bolsa de 30 litros o incluso una de 50 litros.

Haciendo malabares con el volumen

Si tu equipo es demasiado voluminoso, tendrás que usar una mochila grande. Así que mantente cómodo con un modelo más pequeño. Para ello, reemplace algunos componentes por otros. Por ejemplo, en lugar de llevar un enorme rollo de papel higiénico, opte por los paquetes de pañuelos de papel aplastados. Estos son más fáciles de almacenar y apilar.

También puedes dejar el vellón para las chaquetas. De esta manera, tendrás espacio y aún así tendrás ropa que te mantenga caliente. Y para los zapatos, elija un modelo bajo en lugar de uno alto como las botas de alpinismo. Esto le dará la ventaja de la flexibilidad, el volumen y el peso al mismo tiempo. Del mismo modo, si no puedes arreglártelas sin tu ordenador, apóyate en un dispositivo más pequeño como una tableta.

Aislando ciertos componentes

Organizar el equipo de senderismo también significa asegurar los componentes. Para ello, primero se aísla el saco de dormir con una cubierta impermeable. De esta manera, aunque las condiciones climáticas se salgan de control (lluvia, lluvia, tormenta), siempre tendrás la cama seca para dormir. Asimismo, para los pocos dispositivos electrónicos como relojes, teléfonos móviles o GPS, se debe proporcionar un bolsillo impermeable para mantenerlos seguros.

En cuanto a la comida para un día de caminata, separar en un recipiente todos los jugos de la comida. Si el menú en cuestión es sopa de pollo, no perderá ni una gota. Y por último, evita a toda costa mezclar ropa sucia con todo lo demás. Ponga los que ha usado en un envoltorio de celofán y si planea ponerlos en los próximos días, extiéndalos al sol si no tiene tiempo de lavarlos.

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